Cuando el mejillón se va a comercializar en fresco, se limpia ya con mucha agua de mar en el propio barco para destinarlo a los comercios.
Si en cambio su destino es el cocedero, el cual se encuentra en el mismo puerto de Aldán, se realiza una primera limpieza en el barco, y posteriormente en el cocedero, se procede a su tratado y posterior envasado, listo para comercializar.